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miércoles, 23 de agosto de 2023

PROBADITAS DE CONTRA AMOR.

 Tiene mucho que no hablo de contra amor, y ya es urgente retomarlo en términos de la palabra escrita y hablada para compartir, ya que en la vivencia ando bien activa.

Nomás paso rápido para decir que el contra amor, es una postura ética y política eminentemente interseccional, donde se sostiene que es imposible analizar los discursos del “amor” sino hay una conciencia y reflexión sobre la articulación de múltiples y simultaneas subordinaciones que atravesamos los seres humanos, en particular las mujeres y personas trans y que están intrínsecamente relacionados con la clase, el género y la raza.
Hablar del “amor”, así nomás y conjugarlo con un montón de significantes o multiplicidades, que en conjunto suenan bonito, pero sin reflexión crítica, es como hablar de feminismo blanco, y pensar que la “igualdad” abraza nuestras vidas. Puritas falacias.
Ahorita ando leyendo gracias a mi amada Guadalupe a la boliviana María Galindo, y ¡caray, caray! Esos feminismos bastardos tan amamachables para la cuerpa y los afectos.
Linda Esther Lozano, Marsh Barajas y 17 personas más

miércoles, 25 de marzo de 2015

Le llaman trabajo y yo nombro activismo

Hoy tengo desparpajo y por eso voy a contar con descaro (pues caray a quien le importa, jejeje) que estoy –aún con un terrible dolor de cabeza y dientes, que me hicieron no ir a la preparación de un seminario y cancelar a esa mujer que quiero tanto- bien contentota.


Empecé hace rato, a las ocho treinta de la noche una clase en el ESIME del Politécnico con ingenieros e ingenieras, y contrario a prejuicios y bostezos previstos, para mi sorpresa y deleite fue una clase llena de interacciones, con una chispa de fluidez que nos hizo co-participar de una experiencia de construcción de conocimiento compartido.
¡Si es posible –lo acabo otra vez de comprobar- pensar y hacer pedagogía libertaría!
Ya lo he dicho y lo reitero: tengo un idilio con la docencia, no… no, rectifico, no con la metafísica de la enseñanza sino con los humanxs que quieren compartir.
Me gusta mucho lo que le llaman trabajo y yo nombro activismo, me gusta también, esta toronja que ahora devoro.
Buenas noches.

jueves, 26 de febrero de 2015

ENTREVISTA SOBRE POLIAMOR EN EL PROGRAMA "LUCHADORAS"

Este ha sido un Febrero muy anti amoroso en términos convencionales, dado que por acá y más allá, hemos compartido activismos sobre las disidencias afectivas en muchos de sus dimensiones y caminos. Ese amor romántico, ese amor de violencia, ese capitalismo emocional es al que le decimos "YA BASTA".

Y entonces desde abajo y en la izquierda, trabajamos por afectividades radicales, desde la ternura, el compartir, el estar y saberse también en el otre, pero desde un empoderamiento de nuestro senti-pensar.

Y acá rolando una entrevista con el programa de LUCHADORAS.

¡Me encanto participar! Ustedes ya dirán que les parece ;)

https://www.youtube.com/watch?v=Rh6LbQE31vE

lunes, 16 de febrero de 2015

Catarsis de una semana de Febrero

La semana que ayer tomó su noche final, resulto interesante, activa, por ello como no suelo hacerlo, comparto caracoles, 

Independientemente del accionar laboral y de entorno que es parte de la vida cotidiana, también me habitaron acciones, personas y momentos importantes. Aprendí y retome cuestiones de la controversial ciudadanía ateniense; vi a ese amigo querido que como chispazo habla de cine, oscuridades y vuelcos que le sorprenden y pasman; conocí mujeres re-quete-chulas en ideas y caminar y me invitaron para grabar un programa de televisión por internet sobre estas cosas del "amor"; aporte, manifesté acuerdos y desacuerdos sobre lo que ahora como colectivo nos dará carnita renovada; luego tráfico, complejidades magisteriales, mucha desinformación; noche de hoteles y masaje de piecitos; sangre de siembra y cine... más cine, una receta placentera de tres veces por semana, pero en esta ocasión con esas amigas que aunque el tiempo nos aprieta para vernos, damos escapadas que dejan claro que nunca es suficiente; después besos, más besos y una triple dosis de besos para construir alegría.

Debates con ingenieros, desveladas, desmañanadas, muchas desmañanadas, la transmisión de un programa de radio ya grabado en la todavía sobrevivencia de la amplitud modulada sobre "poliamor" y la mesa de diálogo en otro programa de los carajos y demás... sobre otra vez el amor, pero ahora desde el canijo siglo XXI; después desencanto -otra vez- sobre los modos de imposición del imaginario sentimental sobre y contra las mujeres, que hace que algunas celebren que el "chico guapo" de la historia, controle y violente a una chica, además del aburrido sexo heterosexual en tres escenas de cinco minutos; sábado de mitin con muchos aprendizajes y la urgente autocrítica; el placer inmenso de verla otra vez, radiante y feminista, mujer de lentes y agua; fiesta encorsetada, música para quitar el frio, otra vez el Manifiesto, y ganas de nuevas ganas.

Billar y que ellxs dos se encuentren y que sepan -aunque ya lo saben- que lxs contra-amo con afectación singular. Domingo de capuchinos, abrazos a la luna, al saturno,  Yuli y la madre querendona, y por supuesto a pacolito. Viaje, siempre, viaje.


Espiral, vida circular, ojos alertas, vitaminas para mañana. Ahora a construir al lunes, escapar solo por un momento de cientos de adolescentes y correr para abrazar a Neftis, Bastet y Hator. Madrugar, que el tiempo no espera.   


martes, 6 de enero de 2015

¿Otra vez?

Y sí, se llama indignación, rabia, impotencia, se llama horror.

¿Qué escribir para proponer consuelo a la madre de la compa enfermera Ericka de Michoacán, de Liliana del Estado de México de las miles ya de desaparecidas en esta fosa común que aún se atreven a llamar patria?

Ayer los padres, las madres de nuestros compañeros de Ayotzi hablaban de buscar y seguir buscando –otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez- a sus hijos desaparecidos…

Ayer  –otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez- las calles se inundaban para exigir justicia, la renuncia de Peña Nieto (que aunque simbólica, de fondo no soluciona nada) y tantos miles de etcéteras que no caben en nuestras consignas.
Necesitamos una, dos, tres más de cien mil palestras no sólo para los 43, sino para todas las denuncias contra las desapariciones, secuestros, asesinatos de mujeres, de niñas… ¿Cuántas veces el país se ha paralizado por ello?
Pienso en el señor que ayer hacia muecas mientras su coche no podía avanzar entre la marcha y en la señora que se metía rápido al “Samborns” para que su hija no le doliera la cabeza con tanta gente y al pensarlos, miro a los políticxs de cualquier partido o jerarquía, miro a una parte de la sociedad que piden que se restablezca el “Estado de Derecho” y apoyan la nueva ley anti-marchas, miro la indiferencia y el paso largo que no sonríe, y también miro a quienes criminalizan y señalan con furia a lxs que se cubren el rostro y dicen –de un lado y del otro- que hay una “única manera de hacer las cosas”...
Pero, también miro a muchxs manifestantes que siguen gritando ante la imagen de esxs señores de la política del mastream: “que chingen su madre” “puta de cabaret” “prostituta” “puto” y se enorgullecen de una verborrea sin análisis, plagada de patriarcado, plagado de un Estado inserto en las venas, en las palabras. Y sí entiendo nuestro hastío y desesperación… ¿pero ellxs entienden que a las mujeres, disidentes del sexo y el género también nos están matando? ¿Las luchas son iguales o hay unas más iguales que las otras?
¿Y si –otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez- las calles no son suficientes, ni los gritos, ni las denuncias? Y no hablo de desesperanza ni de conformismo.
Hablo de buscarnos y de encontrarnos, de reflexionar en conjunto, de discusiones de paso a pasito que nos lleven a las acciones concretas, grandes y/o chiquitas pero movilidad en la acción. Hablo del encuentro abierto entre personas, de la formación de redes de apoyo, de colectivizar la auto-defensa, de entender con claridad que no se trata solamente de una marcha, pancarta, hasgtag, hablo de salir de coyunturas y no esperar nuevos pater-mater-nalismos, de una conciencia crítica y auto critica que como manada y después como diáspora, nos permita escucharnos y caminarnos. No tiene que ser por la misma vereda o pretensión, pero sí con los ojos abiertos que nos permita el reconocimiento, el acompañamiento.
Hablo de cuestionar incluso la propia condición humana que pareciera nos “sujeta” a sus dinámicas de poder, egoísmo, y a veces en extenso a no mirar ya siquiera el rostrx del otrx.
Y ya no hablo, sino pienso… salgo a la calle y de muchas formas quiero reconocerme en el otrx, actuar deconstruyendo-me, romper para retomar y recuperar… transgredir.
Se llamaba indignación, rabia, impotencia, se llama horror.
Quiero ahora nombrarlo digna rabia y una alegría que ahora son lágrimas que –otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez-–otra vez- buscan organizarse.
¿Qué propones?







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TodxsSomosErikaCassandraBravoCaro

Diana Marina Neri Arriaga

viernes, 18 de abril de 2014

La ambivalencia sobre un excelente escritor con ideas de izquierda pero con todos los privilegios de un macho muy bien acomodado.

Como muy seguido me sucede (realmente a cada rato) vivo con ambivalencias, pero hoy se trata de un revoltijo de ideas y emociones en relación a la muerte del García Márquez. Por una parte, me parece triste ya no saber de nuevas letras de uno de los hombres que me enseñaron a conocer Colombia mucho antes de conocerla, a inventar también mi propio Macondo y colocar ahí mil historias de ruidos mágicos donde estaban mi versión escolar de esa mala hora o la mamá grande en toda la poética de sus funerales, me enseño a darle a la cotidianidad un toque mágico y de algún modo a él y a Galeano, “les debo” el ser “hiperbolera” como dirían esos hombres amados.


Y sí, yo también siendo adolescente leí 100 años de soledad y gracias a Jaime (por quien conozco Colombia y es un especialista del Gabriel) volví a redimensionar lo poderoso de ésta obra. Lloré y lloré con la Cándida y con esa canija a la n de la abuela desalmada; con crónica de una muerte anunciada y relato de un náufrago -a mis tiernos años púberes- les dio tema de reflexión existencial, y conocí en la literatura a mis primeras angustias; y alguna vez intentando hacer una crónica, me puse a buscar textos y textos de este señor periodista para intentar copiarlo. Como olvidar el discurso de “la soledad de américa latina” cuando recibió el nobel de literatura en esa década ochentera.


¡Zaz! Me acompaño como tantxs otrxs en años importantes, pero tampoco olvido que el dichoso Gabo es un misógino, hijo muy sano del patriarcado, que sus modos de abordar el tema amoroso no escapa para nadita de las perpetuaciones “románticas de la propiedad privada”, siempre colocándonos a las mujeres como el “objeto de deseo” las que lo damos todo por “sacrificio” y las perfectas “victimas” y que decir de las historias planteadas en “El amor en los tiempos del cólera”, “Doce cuentos peregrinos” o de las memorias de “mis” “putas tristes”.



Pregunto a los que ahora hablan vanaglorias de éste hombre y reparten citas por doquier, ¿Por qué no colocan esta? “El año de mis noventa años quise regalarme una noche de amor con una adolescente virgen”.
Probablemente me dirás: “separa el autor de su obra” y lo hago, de otro modo no leería a casi nadie, pues en todxs y cada unx de nosotrxs, hay contradicciones, grandes contradicciones. Y en este caso lo nombraría como un excelente escritor con ideas de izquierda pero con todos los privilegios de un macho muy bien acomodado.
Con Foucault he aprendido sobre ¿Qué es un autor? ¿Qué es una obra?, sin embargo con todo y contradicciones y saber mirar al autor, saber mirar a la obra, si me parece – y por ello ahora lo afirmo- que seguimos cayendo irremediablemente en hablar de la muerte y sus tristezas, sólo cuando se trata de los “grandes” de la tele, la literatura, la música, y el arte… Pero ¿quién hace caso de las vidas y muertes cotidianas que no salen en los periódicos y no alcanzan siquiera a ser noticia? De las familias y las historias de los nueve cuerpos –por ejemplo- que hallaron apenas en una fosa clandestina en Guerrero, o las vidas de cada una de las 6 mujeres asesinadas a diario que según la ONU (como dato oficial) se reportan como feminicidios en este país, o del asesinato a Edgar, o de ese poeta que no es Paz, pero caray, escribe como abrazo de flores olorosas.


Apuesto y conmino por una visión crítica y heterogénea de los discursos y las posiciones, sin blancos o negros definitivos, pero sobre todo, invito a no vitorear por vitorear como click sistemático, a reflexionar sobre todas las complejidades de las personas y sus acciones, a informarnos –también- en caminos alternativos y disidentes y denunciar lo que haya que denunciar.
Fin de la ambivalencia.

DIANA MARINA NERI ARRIAGA.

PROBADITAS DE CONTRA AMOR.

  Tiene mucho que no hablo de contra amor, y ya es urgente retomarlo en términos de la palabra escrita y hablada para compartir, ya que en l...